Ganar y retener clientes, depende básicamente de tener su confianza. La tecnología ya existe para poder convertirse en el socio confiable de cada cliente individual.

La identidad tecnológica nos revela el poder de las decisiones del consumidor.

Nadie elige su edad, etnia u otras características comúnmente utilizadas para clasificar a las personas en tipos demográficos.

Pero tener una cuenta de Facebook o un dispositivo doméstico inteligente es una decisión.
Muchas decisiones nos dan una huella tecnológica, por ejemplo: qué marca de teléfono inteligente lleva una persona, o si lleva uno en absoluto. Si activa o no el seguimiento de la ubicación, si utiliza un dispositivo de «fitness» o deja que una compañía de seguros supervise sus parámetros de manejo a cambio de un descuento en la póliza. Todas estas son opciones, impulsadas por la conveniencia, la accesibilidad y la confianza  que una persona tiene en una empresa en particular

La gente confía servicios digitales para pagar facturas, comprar, ponerse al día con amigos, recibir las noticias, trabajar y entretenerse; incluso en los movimientos sociales

Hoy gracias a las conexiones de ecosistemas, las empresas podemos acceder a la información sobre la huella tecnológica de una persona incluso si esa persona nunca ha interactuado con nosotros.

El éxito consiste en integrarse a la perfección en las opciones tecnológicas de cada individuo, extrayendo información no solo de las tecnologías que una persona ha adoptado, sino también cómo las utilizan.

El cambio hacia experiencias impulsadas por la tecnología ya empezó y es en serio.

Ahora, las experiencias están empezando a ofrecer una visión viva, más holística y continua de las actividades digitales, capacidades tecnológicas y preferencias de los clientes, además de sus necesidades y objetivos personales.

Las identidades tecnológicas no solo reflejan las identidades generales de los consumidores, sino que también definen nuevos aspectos de la vida de las personas en una época en la que todo es digital. Comprender esto te da una visión viva e individualizada de cada consumidor, una que se necesita para ofrecer relaciones ricas, continuas y basadas en la experiencia en la era post-digital.

La confianza se gana al respetar su privacidad y obtener su consentimiento

Trust o confianza es la diferencia entre crear una experiencia personalizada y sin fisuras que se integre perfectamente en la vida de un cliente específico, o perder la confianza de un consumidor y un relación potencialmente de por vida

Tenemos que poder reconocer que hay momentos en que los consumidores quieren más tecnología en sus vidas, pero también momentos en los que no la quieren en sus vidas en absoluto.

Individualización y la privacidad.

Las empresas pueden utilizar las identidades tecnológicas para crear experiencias individualizadas y perfectamente integradas para el mercado de uno  a uno. Pero esta oportunidad crea una gran responsabilidad.

A medida que las empresas avanzan hacia el servicio de uno a uno, deben seguir la línea entre «útil» y lo invasivo, y tener en cuenta que la línea variará para cada persona. No todos piensan igual, para algunos la personalización les causa incomodidad mientras que otros consideran la personalización increíblemente útil

El valor de gestionar los consentimientos del cliente

Recabar y gestionar sus consentimientos nos permite entender sus preferencias para crear y mantener la confianza con los clientes a medida que las ofertas se individualizan cada vez más. Ya sea para fines de marketing, para encontrar la mejor manera de comunicarse con un cliente en particular, o para proporcionar soporte.

Requiere comprender cómo se utilizan las tecnologías en una variedad de contextos, no solo en qué tecnologías se utilizan. Esto te ayudará a crear una visión individualizada de los consumidores, necesaria para construir una relación profunda y continuada con ellos.

Cada nuevo producto o servicio es una oportunidad de prestar mucha atención a todo, desde la conectividad de red básica de los consumidores hasta los ecosistemas tecnológicos en los que eligen participar. Cada vez más, las decisiones empresariales estarán impulsadas por los niveles de acceso de los consumidores a la tecnología.

Conoce nuestras herramientas de gestión de privacidad con un plan de compliance

1 Hacer un diagnóstico de cómo se manejan los datos del cliente en la empresa

2. Hacer un inventario de dónde y cómo se manejan los datos, para combinar el conocimiento de sus clientes existentes (desde marketing, soporte y otros equipos) con datos obtenidos de identidades tecnológicas

3. Obtener sus consentimientos y gestionarlos permanentemente para entender su sensiblidad a la personalización del servicio

4. Mantener la información actualizada de acuerdo con las normas y estándares internacionales de protección de datos personales

Los estándares de la gestión de consentimientos

Obtén más información de cómo gestionar la identidad tecnológica de los clientes. Aquí

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3 comentarios

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